O actuamos como caballeros, o como lo que somos.
Cantinflas
Cantinflas es uno de los personajes cómicos más emblemáticos del cine nacional. Interpretado por el actor Mario Moreno Reyes (Ciudad de México, 1911–1993), este payaso “peladito” nació a principios de la década de los años treinta, en el escenario del Teatro Carpa Mayab, cuando el actor apareció ataviado con un pantalón caído a media nalga, un sombrero arrugado, una camiseta blanca con agujeros, un chaleco viejo al que le decía “gabardina”, un trapo al hombro y otros andrajos…, sospechosamente parecidos al atuendo del Chupamirto, personaje de historieta mexicana creado por el caricaturista Jesús Acosta. Cuentan que el nombre surgió cuando, a media función, alguien le gritó al actor: “¿Cuánto inflas?”, para saber si su hablar nervioso e inentendible se relacionaba con su estado etílico.
Cantinflas pasó con éxito de una carpa a otra, realizando un acto en compañía de Valentina Ivanova, esposa del actor, y Estanislao Schilinsky, su cuñado, hasta llegar al cine.
En 1940 filmó la película que lo hizo famoso: Ahí está el detalle. Rodó más de 39 filmes entre los que destaca La vuelta al mundo en 80 días (1956), por el que ganó un Globo de Oro en la categoría de Mejor actor de comedia y se convirtió en el actor de la época mejor pagado en el mundo.
Mario Moreno Reyes: empresario, torero cómico, activista por los derechos de los actores, altruista y generoso, fue la estrella número 1,722 en colocar sus huellas en el Paseo de la Fama de Hollywood.
El peculiar uso del lenguaje de su personaje, que hablaba mucho para decir poco, inspiró la creación del verbo “cantinflear”, reconocido por la Real Academia Española en 1992, junto a los adjetivos “cantinflesco”, “cantinflero”, “acantinflado” y el sustantivo “cantinfleo”.